La disparidad entre el fútbol varonil y femenil sigue siendo una problemática profunda, especialmente en lo que respecta al trato y respeto hacia las futbolistas. En un incidente reciente, las jugadoras del Club Tijuana Femenil denunciaron a través de redes sociales la disconformidad que recibieron al encontrarse con el vestidor de visita en el Estadio Caliente, que es utilizado por ellas, en condiciones deplorables tras el paso del equipo varonil.
El vestidor de visita del Estadio Caliente, es un espacio que tradicionalmente pertenece a las futbolistas de Tijuana Femenil. Este está adornado con las fotos de las jugadoras, donde se destaca su trabajo e importancia en el equipo.
Sin embargo, ayer, durante el partido del equipo varonil de Xolos contra los Rojinegros, este vestidor sufrió un acto de vandalismo. Las fotos de las jugadoras fueron arrancadas y el vestidor fue dejado en un estado lamentable.
Aunque aún no se ha confirmado quiénes fueron los responsables, el enojo y la frustración de las futbolistas se reflejaron en las redes sociales, donde exigieron respeto. Sobre todo la mediocampista Inglis Hernández que fue una de las primeras en alzar la voz, manifestando su indignación por lo ocurrido.
“Todos los equipos saben que el vestidor que Xolos presta es de la femenil. Entonces, ¿por qué Atlas varonil se sintió con el derecho de quitar nuestras fotos de nuestro vestidor cuando ellos solo son visitantes?”, escribió.
Este incidente ha generado un fuerte debate sobre el trato desigual entre ambos géneros en el fútbol, poniendo de manifiesto las deficiencias en la inversión y el respeto hacia el fútbol femenino.
Por ello, las jugadoras de Tijuana Femenil, a través de redes sociales, han exigido una mayor dignificación y respeto, recordando que el trabajo y el esfuerzo de todas las futbolistas debe ser valorado en igual medida que el de sus compañeros varones.
Este incidente marca la necesidad de una reflexión profunda sobre el trato que reciben las mujeres en el deporte y la importancia de garantizar que, en todos los niveles, se respeten sus logros y se mejoren las condiciones que actualmente siguen siendo inferiores a las del fútbol varonil.