La última carta legal de Julio César Chávez Jr. acaba de ser rechazada. El hijo de la leyenda del boxeo se ha quedado sin el amparo que buscaba para frenar la orden de aprehensión en su contra, y todo apunta a que su detención por parte de las autoridades mexicanas es cuestión de tiempo.
Desde hace más de un año, el nombre de Chávez Jr. dejó de aparecer en las páginas deportivas para ocupar titulares en temas judiciales. Acusado de delincuencia organizada y tráfico de armas, el boxeador había logrado evitar su arresto en México al residir en Estados Unidos, pero la situación dio un giro radical este julio, cuando agentes de inmigración lo detuvieron en California por violaciones migratorias y presuntos vínculos con el Cártel de Sinaloa.
Ahora, con un juez federal negándole la suspensión de la orden de aprehensión, no hay ninguna barrera legal que lo proteja. Según la resolución judicial, el amparo solicitado por Chávez Jr. no procede porque no se trata de una detención arbitraria, sino de un proceso judicial legítimo por delitos graves. La defensa tiene solo tres días hábiles para ratificar la solicitud, pero los expertos aseguran que incluso con eso, la extradición ya es inevitable.
El proceso ya se puso en marcha en Estados Unidos, donde las autoridades iniciaron su remoción acelerada por no contar con una estancia legal en el país. El gobierno mexicano, por su parte, ha confirmado que hay una solicitud activa de extradición y que el caso está bajo investigación desde 2019, aunque no se había actuado antes por falta de presencia del acusado en territorio nacional.
Mientras tanto, el exboxeador permanece bajo custodia de ICE en una prisión federal. Fuentes cercanas al caso revelaron que podría ser trasladado a México en los próximos días, donde enfrentará cargos que podrían llevarlo a prisión por varios años.