El pasado sábado, México vivió una noche para el olvido. La Selección Nacional cayó 4-0 ante Colombia en un amistoso que dejó más dudas que certezas, especialmente en una zona que debería transmitir seguridad: la portería.
Luis Ángel Malagón fue el encargado de defender el arco tricolor, pero su actuación quedó marcada por su mal desempeño a la hora de salir. Aunque se trató de un partido de preparación, el resultado encendió las alarmas y obligó a Javier Aguirre a replantearse una pregunta clave rumbo al Mundial 2026: ¿quién será el portero titular de México?
El “Vasco” sabe que no hay margen para la improvisación. En esta Fecha FIFA también fueron convocados José Antonio “Tala” Rangel y Carlos Acevedo, dos porteros con estilos distintos pero con el mismo objetivo: ganarse la confianza del técnico. Rangel, con juventud y reflejos rápidos; Acevedo, con carácter y liderazgo, aunque todavía en busca de su mejor nivel tras las lesiones.
La portería mexicana vive una transición complicada. Con Guillermo Ochoa ya fuera del panorama, México busca a su nuevo referente bajo los tres palos. Aguirre necesita a alguien que no solo ataje balones, sino que se convierta en un líder capaz de ordenar y dar confianza a una defensa que luce insegura.
El 4-0 ante Colombia no solo fue una derrota en el marcador, sino una señal de que el arco tricolor sigue sin dueño. Y mientras el Mundial 2026 se acerca, el “Vasco” tendrá que decidir pronto quién será el guardián que defienda la camiseta nacional frente al mundo.