La Selección Mexicana no solo conquistó el título de la Copa Oro 2025, también se llevó a casa una suma millonaria que refuerza su poder dentro de la Concacaf. El campeonato, logrado tras una intensa final ante Estados Unidos, dejó más que gloria deportiva: dejó billetes verdes y muchos.
De acuerdo con cifras extraoficiales de medios cercanos a la Concacaf, el Tri se embolsó cerca de 2 millones de dólares en premios directos por coronarse campeón del torneo. Una cifra que supera lo otorgado en ediciones anteriores y que confirma el crecimiento económico de la competencia más importante de la región.
Pero el verdadero ingreso para México va más allá del trofeo. Durante el torneo, la Selección Nacional generó una derrama económica superior a 12 millones de dólares, derivada de patrocinios, venta de playeras, derechos de transmisión y entradas agotadas en cada estadio donde se presentó el Tri. Empresas como Adidas, Coca-Cola, AT&T y Banorte, socios comerciales de la FMF, activaron campañas millonarias aprovechando la fiebre tricolor, lo que elevó el valor de marca.
Además, con partidos transmitidos en más de 30 países y audiencias récord en México y Estados Unidos, el torneo representó una vitrina inmejorable para el futbol mexicano, que ahora se proyecta con fuerza rumbo al Mundial 2026.
Con este ingreso, la Federación Mexicana de Futbol podría reforzar sus proyectos de formación, infraestructura y fogueo internacional, especialmente en un contexto donde el futbol mexicano busca renovarse y recuperar credibilidad tras años de altibajos.
La Copa Oro 2025 dejó en claro que cuando México gana, gana en todos los sentidos: en la cancha, en los bolsillos y en la conexión con una afición que volvió a vibrar con su selección.